La trampa política en reunión morenista: al desnudo los falsos redentores.
- Prosperistas pensaron engañar a la Dirigente de Morena Sonora.
Subrayado y con Negritas.
Por Gerardo Castro Ruiz
El encuentro con militantes morenistas en Navojoa, al que
asistió la Dirigente Estatal de Morena, Judith Armenta, desde su origen no
tenía el propósito de fortalecer al Movimiento de la 4T.
Eso fue mero pretexto, pues la verdadera intención era
disparar políticamente contra el Presidente Municipal, Jorge Alberto Elías
Retes, en una clara lucha por el poder. Y es que nadie ignora que el Diputado
Próspero Valenzuela Muñer anhela gobernar Navojoa, lo cual es legítimo, pero
hay que llamar a las cosas por su nombre: se trató de una estrategia para
debilitar el gobierno de Elías Retes y, según sus cálculos, fortalecer su
propio proyecto político con Próspero al frente.
Los asistentes, autoproclamados como los morenistas más
puros, se colocan por encima de Andrés Manuel López Obrador, juran ser los
verdaderos transformadores del país y se atribuyen más derechos que cualquier
otro para ocupar cargos de elección popular. A quienes no forman parte de su
círculo, los señalan como oportunistas.
En este encuentro quedó claro que la política para
fortalecer a Morena fue relegada a un segundo plano. La reunión se convirtió en
una plataforma para atacar a Jorge Elías y menospreciar las acciones
emprendidas para llevar a Navojoa al siguiente nivel.
Las críticas se centraron en el ajuste del predial, la
tarifa de agua potable y la marcha que busca revertir estas decisiones. Sin
embargo, la dirigente de Morena en Sonora dejó las cosas en claro: nada de
grilla interna, nada de divisiones, solo unidad y temas de partido.
Ese era el propósito original de la reunión, pero pronto
quedó al descubierto la trampa cuando las intervenciones destilaron ambición de
poder. Quedó evidenciado que todas las participaciones llevaban la marca del
proyecto de Próspero Valenzuela Muñer, quien, paradójicamente, desde el
Congreso avaló el ajuste del predial, pero ahora, aprovechando el descontento
ciudadano, busca sacar ventaja del río revuelto.
Entre los asistentes se encontraban ex regidores que buscan
seguir su carrera política y andan en busca de cargos, así como ex funcionarios
cuyo paso por la administración dejó un amargo recuerdo. Otros, más que
defender al pueblo (algo que solo pregonan de los dientes para afuera),
esconden su frustración por no haber conseguido un puesto en el gobierno
actual. (La foto que acompaña a esta columna habla por sí sola).
Entre los más críticos destacó la secretaria del Diputado
Próspero Valenzuela, quien se quejó de que los funcionarios del gobierno
municipal actual no son "auténticos morenistas".
En la misma línea estuvieron Julio Duarte Ruiz y Néstor
Duarte, exigiendo que Morena salga a las calles. Rubén González también se sumó
a las críticas, a pesar de que su esposa fue directora del DIF en la
administración de Chayo Quintero fue contra la Ex Alcaldesa. Pero además,
González vio en la molestia ciudadana una oportunidad de negocio, ofreciendo
amparos contra el pago del predial.
También estuvo presente Guadalupe Morales, el controvertido
ex Secretario del Ayuntamiento en el periodo de Rosario Quintero,
administración señalada como una de las principales responsables de la crisis
actual en Navojoa.
El plan fue ejecutado, pero las cuentas no salieron como
esperaban. Lo único que lograron fue quedar como llorones, como enemigos
internos y desestabilizadores, no solo del gobierno de Jorge Elías, sino de su
propio partido Morena. Y eso es lo verdaderamente grave. Esa es la radiografía
que la dirigente de Morena en Sonora se llevó de este grupo de falsos
redentores.
Punto Aparte.
El término "falsos redentores" se utiliza para
describir a aquellas personas que se presentan como salvadores o líderes
carismáticos con soluciones aparentemente milagrosas, pero que en realidad no
tienen la capacidad, intención o integridad para cumplir sus promesas. Estos
individuos suelen aprovecharse de la desesperación o necesidad de las personas,
utilizando tácticas manipuladoras para ganar seguidores y consolidar poder o
influencia.
En la historia y en la literatura, los falsos redentores son
personajes que, a través de engaños y promesas vacías, llevan a las personas a
situaciones difíciles o incluso peligrosas. La figura del falso redentor sirve
como una advertencia contra la credulidad y la búsqueda de soluciones rápidas y
fáciles a problemas complejos.
Esto, el pueblo ya lo sabe.
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